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Psicoterapia Corporal… ¿Para qué?

No todas las Psicoterapias Corporales trabajan con el cuerpo bajo iguales condiciones, objetivos y técnicas terapéuticas. Y además, no todo trabajo corporal se enmarca en el ámbito de la Psicoterapia

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8 mins
terapia-corporal-reichiana
Imagen: Yolanda Carrascosa
Toda rigidez muscular incluye la historia y la significación de su origen. Su disolución no sólo libera la energía, sino que también trae a la memoria la situación infantil en la que se ha producido la inhibición
– Wilhelm Reich –

Ir al psicólogo ya resulta controvertido en algunas sociedades carentes de cultura terapéutica.  Y aún cuando poco a poco se va naturalizando la aceptación de ayuda psicológica, la imaginación mayoritaria es la siguiente:

Te sientas en frente del psicólogo o psicóloga y le cuentas tus problemas. Después de unas cuantas preguntas él o ella te da la respuesta para solucionarlo. Pagas y te vas pensando… 

a) Que te valió la pena pues saliste más tranquilo/a 

b) Que más barato te hubiera salido invitar a tu amiga a comer

c) Que es verdad eso que dicen… que tú no tienes remedio

Ahora resulta que te animas y llamas para pedir una cita. Y por recomendación o tal vez por casualidad vas a parar a la consulta de un/a terapeuta reichiano/a, que te propone una Psicoterapia Caracteroanalítica, lo que supone un trabajo Psicocorporal

Mientras te recuperas del trabalenguas, puede que te ilusione la idea de que esta terapia te ayudará a resolver lo que te agobia y quizás te lances a la aventura con sana curiosidad. 

O puede que te quedes a cuadros cuando el/la terapeuta te muestra un diván en el cual, a partir de ahora, vas a pasar un buen tiempo desbloqueando tu cuerpo. En este caso tal vez pienses… ¡era verdad eso de que los psicólogos están locos!

El trabajo Psicocorporal en Psicoterapia

Para empezar, no todas las Psicoterapias utilizan la herramienta corporal y no todas las Psicoterapias Corporales trabajan con el cuerpo bajo iguales condiciones, objetivos y técnicas terapéuticas. Y además, no todo trabajo corporal se enmarca en el ámbito de la Psicoterapia. 

Incluso, dentro de la misma corriente psicoterapéutica hay matices según escuelas. Por mi parte, me he formado como Psicoterapeuta Caracteroanalítica en la Escuela Española de Terapia Reichiana (EsTeR) y allí es donde he aprendido prácticamente todo lo que sé sobre la sistemática reichiana. Por lo tanto, aún tomando en cuenta otras influencias que  me han ayudado a ampliar la mirada, es su punto de vista en el que me apoyo para hablar del tema. 

Desde esta visión española, el modelo psicoterapéutico desarrollado por Wilhelm Reich fue luego sistematizado por sus continuadores, entre los que se destacan Ola RaknesFederico Navarro, para llegar a las actuales escuelas de formación en psicoterapia reichiana como es la EsTeR, institución dirigida por Xavier Serrano.

¿Para qué se trabaja con el cuerpo en Psicoterapia? 

Sabemos que lo que comunican las palabras no siempre coincide con lo que dice el cuerpo. Un ejemplo cotidiano es el momento en que nos encontramos con el amigo que nos cuenta lo bien que le va mientras sus ojos apagados y el rictus de sus labios nos expresan todo lo contrario. 

Nos demos cuenta o no, dos informaciones contradictorias están comunicando una sola certeza: que hay un conflicto entre lo que piensa y lo que siente y que este conflicto puede no ser consciente.  

Y conscientes o no, las emociones son inseparables del cuerpo. Entonces pretender conocerlas y gestionarlas sin tomar contacto con éste resulta, cuando menos, insuficiente a nivel terapéutico. 

Cuando el fin de la Psicoterapia es ablandar la coraza que nos impide vivir con naturalidad, la participación del cuerpo en el proceso es imprescindible ya que la coraza es tanto psíquica como somática. 

Así que si pretendemos desbloquear la mente sin desbloquear a su vez la musculatura que contiene las defensas del carácter, lo que haremos será tapar con una mano lo que hemos destapado con la otra

Darnos cuenta de la importancia del cuerpo en la salud psicológica es fundamental, tanto como conocer las implicaciones que tiene la movilización del cuerpo con fines psicoterapéuticos. 

El trabajo Psicocorporal, una práctica delicada 

Si el cuerpo está bloqueado y se defiende, es por algo. Los mecanismos de defensa cumplen un papel y aunque se trata de que estas defensas den paso a un funcionamiento más saludable, hay que contar con ellas.

Por esto no son convenientes las intervenciones basadas en el desconocimiento o el mero afán lucrativo o narcisista, buscando generar reacciones intensas, supuestos recuerdos reprimidos que salen todos a la vez, rabias y llantos desenfrenados, consciencias y alivios tan inmediatos como transitorios que lo único que consiguen es reforzar aun más la coraza. 

Porque hay que dar tiempo al organismo para  elaborar las sensaciones que emergen en una sesión de Psicoterapia. No por casualidad se acuerdan los encuentros con frecuencia de uno a la semana, salvo contadas excepciones por motivos particulares previamente analizados. 

En general, los maratones Psicocorporales en plan intensivo, sin un diagnóstico previo de los asistentes y sin más fin que la explosión emocional como demostración de una técnica, pueden ser atractivos para quienes desean experimentar emociones fuertes, pero en realidad sólo llevan a reacciones caóticas, muchas veces sin seguimiento a lo largo de los días posteriores, lo cual supone un peligro para el equilibrio de la estructura caracterial, psíquica y somática. 

¿Cómo se trabaja con el Cuerpo en Psicoterapia?

Como expresaba antes, es muy delicado el trabajo corporal en Psicoterapia. Y por eso es fundamental que haya un diagnóstico, un proyecto y un fin que lleve a un resultado que, como decía Federico Navarro, no sea exclusivamente individual sino también sociocultural. Esto quiere decir que se busca la individualidad mas no el individualismo.  

Tomando en cuenta lo anterior, en el lenguaje reichiano se habla de disolver, ablandar, flexibilizar la coraza caracteromuscular lentamente y con respeto por el cuerpo, pero no se habla de romperla, destrozarla o eliminarla. 

La diferencia entre una y otra cosa refleja en gran medida el proceso, así como la identidad del/la profesional que lo propone. 

Siguiendo con Navarro, hay que empezar por aclarar que no trabajamos sobre el cuerpo sino con el cuerpo.  

Esta insignificante diferencia, en apariencia, constituye uno de los fundamentos de la Psicoterapia Corporal desde la perspectiva reichiana. 

Cada postura, cada movimiento que se propone en la terapia tiene una lógica y un sentido dentro de una sistemática y no se busca con ello producir nada desde fuera, sino permitir que se abran las vías naturales de expresión desde dentro

Es decir que como terapeuta no pretendo en el trabajo con el cuerpo que mi paciente llore en esta sesión, se relaje, se alegre, saque su rabia, se quiera o se odie, me quiera o me odie. 

Ni siquiera busco que vea su situación como yo creo verla tan claramente. Si es así como yo lo veo ya llegará el momento, a su tiempo, a su ritmo.

Lo que me propongo es que salga lo que ya está, pero que se ha quedado atascado en algún lugar del interior. 

Y permitir que salga lo que ya está, créeme, no siempre es fácil cuando estás sentada en frente presenciando en primera fila una coraza que se va abriendo minuto a minuto, a veces imperceptiblemente. 

Hay que hacer mucha terapia personal si uno quiere ser un terapeuta corporal capaz de respetar los procesos de sus pacientes y no esclavo de las ansiedades, las necesidades y los egos propios.  

La Psicoterapia Corporal (Reichiana – Caracteroanalítica) no se limita a la descarga de las emociones

Hay que resolver. Porque se puede estar una hora, dos o cuatro hiperventilando, gritando, llorando como hace tanto tiempo no lo hacía, gimiendo o dando golpes a la pared y salir con sensación de desahogo y seguro que de descarga energética cuando no con un terremoto interno, pero sin tomar contacto real y por tanto sin resolver ni un ápice de los conflictos asociados a determinadas emociones. 

Y si no se resuelven los conflictos a pesar de tanta catarsis, la experiencia no puede llamarse Psicoterapia Corporal, al menos no Psicoterapia Caracteroanalítica, aún cuando se haya implicado al cuerpo y se hayan apreciado reacciones emocionales. 

La misión de la Psicoterapia Corporal consiste en consolidar una estructura de carácter saludable, capaz de resolver positivamente los conflictos. No busca producir reacciones ajenas sino permitir que suceda lo que tiene que suceder en un espacio seguro y con condiciones para contener cualquier emoción que surja espontáneamente.

💧Ultima actualización: 25 Septiembre de 2022

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