38 millones de personas han sido obligadas a huir de sus hogares por causa del conflicto armado internacional o interno, así como por la violencia generalizada, ya sea comunitaria, étnica, política o penal en 2014.
Esta cifra representa un aumento del 13% respecto al estudio del año anterior y ha sido la más alta hasta la fecha, tras 10 años de estudios y publicaciones sobre el tema.
¿Qué significa este incremento?
Según el informe, el constante aumento en el número de desplazados internos en los últimos diez años, refleja la naturaleza cambiante de los conflictos en todo el mundo. Paralelamente, van creciendo las desigualdades extremas en la riqueza, la educación y otras áreas del desarrollo humano, marginando algunas zonas geográficas que suelen ser las más alejadas de las capitales políticas y económicas. Así también, han crecido los sectores anteriormente reprimidos de la sociedad que carecen de representación política y buscan una mayor independencia, poder y control, generando una creciente variedad de grupos armados no estatales, causando a su vez desplazamientos significativos.
Respecto al desplazamiento prolongado, de diez años o más, sucede en casi el 90% de los 60 países analizados. En su mayoría, el desplazamiento prolongado responde a un fracaso para anclar el retorno, es decir, que los programas de desarrollo que permiten la consolidación de la paz no han sido suficientes.
El Desplazamiento prolongado:
Se refiere a la cantidad de tiempo invertido en el desplazamiento, de al menos 5 años con ausencia de solución a la vista, ya sea por medio de una repatriación voluntaria, la integración local o el asentamiento en otro lugar. A nivel general, los criterios para calificar un desplazamiento interno como prolongado son dos: Que la búsqueda de soluciones duraderas se haya estancado y/o que los desplazados internos se queden en una especie de limbo, como consecuencia de una falta de protección de sus derechos humanos.
Muchos desplazados internos que viven en desplazamiento prolongado se han visto obligados a huir varias veces a lo largo de los años. Los ciclos repetidos de desplazamiento implican circunstancias, necesidades y vulnerabilidades más complejas y agudas.
Algunas causas…
No parecen ser los estados los que protegen y prestan asistencia a sus desplazados internos, como debería ser. Este informe comprueba que fueron las agencias humanitarias y las ONG las que atendieron a un tercio de las personas desplazadas. Por su parte, agencias de desarrollo y gobiernos donantes colaboraron en menos medida y no ha existido ninguna inversión visible proveniente del sector privado.
Mientras tanto, en más del 80% de los casos hubo una mayor exposición a los conflictos o a la violencia generalizada en los lugares de refugio. Algunas personas fueron obligadas a moverse de nuevo, porque no se podían satisfacer sus necesidades inmediatas de supervivencia o asistencia. El desalojo forzoso y el impacto de los desastres naturales o la amenaza de ellos, también contribuyeron al aumento de desplazamientos.
Muchas personas en situación de desplazamiento prolongado encuentran que la atención internacional disminuye con el tiempo. Aparentemente sus necesidades dejan de ser urgentes, pero en realidad pueden ser tan agudas como en las fases iniciales. Incluso, en muchos casos la vulnerabilidad aumenta y las condiciones de vida se deterioran con el tiempo, debido a una menor asistencia humanitaria.
Implicaciones…
Las condiciones de vida varían, dependiendo del país, la causa y la duración del desplazamiento. Aparte del agravamiento en las condiciones de salud física, derivado de la inseguridad alimentaria o de las las condiciones higiénicas precarias, este informe destaca que:
- El desplazamiento múltiple y/o duradero, afecta las relaciones familiares y comunitarias hasta llegar a destruirlas. Esto supone que las personas desplazadas son cada vez más vulnerables, en la medida en que se quiebran sus redes de apoyo.
- Los desplazados internos, en algunos países, han sido especialmente vulnerables a la violación de sus derechos humanos, como por ejemplo la violencia de género, el reclutamiento forzado o el abuso de niños.
- La composición demográfica de la población desplazada cambia con los años y décadas. Nuevas oleadas de desplazados internos se unen a los desplazados anteriormente, muchos se mezclan con otros desplazados por diferentes razones y a ellos se suman los migrantes en busca de mejores oportunidades. Los niños desplazados crecen y las nuevas generaciones nacen en el desplazamiento.
- El impacto psicológico del desplazamiento a menudo se descuida, razón por la cual los problemas de salud mental tienden a empeorar cuando se asocian con el trauma del desplazamiento.
Este informe presenta detalladamente la situación del desplazamiento en cada uno de los 60 países analizados, sus cifras exactas, la situación de mujeres, hombres y niños, de jóvenes y de personas mayores, las condiciones de guerra en cada territorio, los niveles de pobreza, las implicaciones en la vivienda y en el empleo, etc.
Considero que es un documento a tomar en cuenta, especialmente en cuanto a la siguiente conclusión:
“El fracaso para hacer frente a las causas del desplazamiento prolongado es el factor principal detrás de las crecientes cifras globales sobre los desplazados internos. Encontrar las soluciones correctas requiere una mejor comprensión del fenómeno, aclarando conceptos clave para el reconocimiento de su complejidad y diversidad”
1 comentario en «Desplazados Internos por el Conflicto y la Violencia: Panorama Mundial 2015»
y no olvidar la tasa significativamente más alta de suicidios y sus intentos…
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